Las mejores excusas para faltar al trabajo y que no te pillen
A todos nos ha pasado alguna vez que no queremos
ir al trabajo, ya sea porque queremos salir de paseo, quedarnos durmiendo o
porque simplemente estamos indispuestos.
Pero… el escenario es peor cuando no hallamos la
excusa perfecta para faltar al trabajo y cumplir nuestro capricho sin que nos
pillen.
¿Qué puedo hacer en estos casos? Bien,
recomendamos que no te pierdas este post porque vamos a darte algunas ideas que
no arruinarán tus planes.
Coartadas para faltar al trabajo
¡Tu
salud o la salud de tu mascota!
Estamos seguros que esta es una de las excusas
más comunes para no ir a trabajar, porque ¿quién no se enferma en esta vida? Y
no solo eso, también puedes convertir a tu mascota en tu mejor cómplice.
Nosotros preferimos no involucrar a nadie de tu
círculo familiar, ya que estas personas podrían terminarlo arruinando todo, en
cambio un perro o un gato no te delatarán.
Algunas de las excusas relacionadas con la salud
podrían ser las siguientes:
·
“Jefe, siento que me estoy desangrando y me duelen
muchísimo el vientre”. Esta es la excusa perfecta para las mujeres cuando su
jefe es un hombre.
·
“Me
voy a morir con esta migraña”. ¿Sufres de migrañas? Entonces esta excusa
siempre te caerá como anillo al dedo cuando quieras faltar al trabajo.
·
“Mi
perro está mal, te llamo luego”. Los lazos que establecemos con nuestras
mascotas suelen ser muy fuertes. Incluso el hecho de imaginar que le ocurra
algo malo nos pone triste. Así que esta excusa es muy buena, tu jefe lo
entenderá.
¿Te damos un consejo? Sé corto, claro y preciso
al momento de decir cualquier excusa. Pues dar muchas explicaciones es de
mentirosos compulsivos.
¡Culpa a otro!
Haz que otro “pague los platos rotos” por tu
ausencia en la oficina ese día. Eso sí, al momento de comunicarte con el jefe destaca
tácitamente tus intenciones de ir trabajar, pero que por “culpa” de otro no
pudiste.
Como expertos en excusas y coartadas te mostramos algunos ejemplos:
·
“Anoche
el hijo de un amigo entró a robar mientras dormía”.
·
“Mi
cocina se incendió por una locura que cometió mi compañera de piso”.
·
“Mi
casa está inundada por culpa de mi vecino, estoy esperando el servicio
técnico”.
·
“Un hombre me robó cuando iba camino a la oficina”.
Como ya te comenté, trata de hacer creer que
tenías intenciones de ir a trabajar y que –lamentándolo mucho- por culpa de
otro te vas a ausentar.
¡Tengo una emergencia y cuelgas!
Si faltaste al trabajo y no diseñaste ninguna
excusa, lo mejor que puedes hacer es decir que tienes una urgencia y cuelgas
inmediatamente.
Esto te dará tiempo para elaborar una excusabuena y creíble. Cuando sea así, la cuestión realmente debe ser grave. Podría
ser:
·
La
muerte de un tío (ya usarías el fallecimiento de un ser querido como último
recurso).
·
Un
accidente de tránsito.
·
Intentaron
asesinar a tu hijo y estás en el departamento de policía.
·
Un
familiar de otra provincia está grave de salud.
Esperemos que estas excusas para faltar al
trabajo sin que te pillen, te resulten útiles para aquellos días en los que no
quieras hacer nada o desees dedicarte a cosas personales. Créenos, ¡sí
funcionan! Y si necesitas más información, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
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